Lo negativo que dejó el pase para los de Rudi Völler fue la suspensión del citado Ballack para la final. Entonces, Sabas, harto de las provocaciones de Petrovic, Nakic y cia, cruza la pista a todo trapo y le suelta un puñetazo a Nakic que le cuesta la descalificación inmediata. Luego diría que marcharse al Espanyol fue la mejor decisión de su trayectoria deportiva.